El derecho a elegir un Notario

Si se pregunta quien elige al Notario, el ciudadano tiene el derecho de recibir un asesoramiento imparcial y de alta calidad. En consecuencia, todo ciudadano tiene derecho a la libre elección de este profesional.

Con este derecho se garantiza que el ciudadano reciba información jurídica objetiva e imparcial antes de firmar un contrato. Así, cualquier persona puede estar segura de tener acceso a la información adecuada para tomar su decisión. Este derecho está regulado por el artículo 126 del Reglamento de la Organización y Régimen del Notariado.

Gracias al derecho a ser informado oportunamente y para evitar posibles litigios, el ciudadano puede asistir a cualquier notaría para informarse debidamente y en cualquier momento.

En el mismo día de la firma de la Escritura o del Acta, el Notario informará sobre el contenido del documento antes de que se suscriba. Pero este proceso se lleva a cabo con antelación a la firma y con la tranquilidad suficiente para asegurar que las partes comprenden de manera clara y conveniente el contenido. Por eso, es importante contar con un Notario de confianza para asesorarse antes de cualquier trámite.

Si pese al derecho establecido, usted considera que no le han permitido elegir al Notario y, por lo tanto, se ha vulnerado su derecho de elección, usted tiene vías para hacer valer su postura:

• Denunciar la situación en los tribunales de Justicia o a una oficina de protección del consumidor.
• Antes de la denuncia, es recomendable que conozca sus derechos en la ley notarial y emplee las herramientas que esta dispone. Por ejemplo, comunicar al profesional que ha elegido la existencia del conflicto con la otra parte. Este será quien ponga esta situación en conocimiento del Colegio Notarial de la región en la que esté. El propio colegio resolverá el conflicto.
• Puede acudir directamente al Colegio Notarial y denunciar el caso. Estas instituciones tienen las competencias necesarias para hacer cumplir las leyes.

La elección de este profesional es un trámite sencillo si ambas partes dentro del contrato están de acuerdo con la elección. Sin embargo, puede ser que alguna de las partes no esté de acuerdo con la persona elegida para dar fe al acto legal. En tal caso, quien pague la mayor cantidad del objeto del acto será quien tome la decisión.

Puede darse el supuesto de que una de las partes involucradas sea una empresa grande. Por ejemplo, un gran operador, un promotor inmobiliario o una entidad financiera y la otra parte sea un consumidor particular. En este caso, el derecho a elegir Notario es del consumidor.

El asesoramiento gratuito y disponer de la libertad para elegir a esta figura pública es fundamental. Permite que aquellas personas que carecen de experiencia jurídica o legal tengan acceso a un servicio de calidad. También para quienes tengan un menor nivel adquisitivo es un respaldo contar con esta regulación.